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Anoche, a las 8:15 p.m., en el Parque Central de Cartago, el presidente Abel Pacheco recibió la antorcha de manos del estudiante Francisco Vargas y luego encendió el pebetero.
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Y brilló el blanco, azul y rojo
Mercedes AGÜERO ROJAS / Al Día
El blanco, azul y rojo brilló anoche cuando millares de estudiantes en todo el país salieron a las calles para celebrar con sus faroles el inicio de la fiesta de los 182 años de nuestra Independencia.
Aunque la lluvia casi no cesó durante toda la tarde y noche, eso no fue impedimento para que niños y jóvenes salieran a las calles con sus coloridos faroles.
Y como es tradición para esta fecha, el Consejo de Gobierno sesionó en pleno en la Municipalidad de la antigua capital, Cartago. Ministros y presidentes ejecutivos rindieron un informe sobre las principales inversiones y programas desarrollados en la provincia, así como los proyectos futuros.
A las 8:15 p.m., bajo una leve llovizna, Francisco Vargas, estudiante del Colegio San Luis Gonzaga, iluminó el Parque Central de la Vieja Metropoli con el fuego de la Antorcha de la Independencia, que posteriormente entregó al presidente de la Abel Pacheco.
La antorcha llegó a Cartago tras atravesar el país de la mano de unos 8 mil estudiantes. Anoche a su arribo, el fuego de la libertad recibió el aplauso de decenas de cartagineses, en su mayoría estudiantes.
Algunas familias viajaron desde poblados cercanos para participar en su recibimiento. Este fue el caso de Jackeline Ceciliano, quien se vino desde Tejar con su hijo Daniel y su esposo Edwin Calvo.
“Siempre venimos porque para nosotros esto es una tradición y debemos mantenerla”, manifestó Ceciliano.
El presidente Pacheco aprovechó su discurso para llamar a los costarricenses a unirse y trabajar para lograr grandes retos, como el de sacar a 900 mil familias de la pobreza.
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